MADRID (AFP) — El Gobierno español cedió por fin a las demandas de los fabricantes y anunció ayudas directas a la compra de coches, dentro de un nuevo paquete para ayudar a las empresas e impulsar el consumo y enfrentar así la recesión.
Quienes compren un coche recibirán una ayuda de 2.000 euros, anunció el presidente del Gobierno español, José Luis Rodríguez Zapatero, en una intervención en el Congreso con motivo del Debate anual sobre el Estado de la Nación.
La mitad la darán las empresas fabricantes y la otra mitad el Gobierno español (100 millones de euros) y los Gobiernos regionales, precisó.
El Ejecutivo español responde así al reclamo que desde hace meses hacen los fabricantes españoles de coches para impulsar la compra de vehículos, que sufre considerablemente los efectos de la recesión.
Hasta ahora sólo había dado ayudas directas la región de Navarra, desde abril, lo que que se tradujo en un incremento de ventas.
Las empresas automovilísticas pedían que las autoridades españolas siguieran así los pasos de 11 países europeos que decidieron ofrecer ayudas directas para fomentar el consumo.
Las ventas de coches en España cayeron un 45,6% en abril respecto al mismo mes del 2008, según cifras de la Asociación Nacional de Fabricantes de Automóviles (Anfac), en línea con los meses anteriores.
La recesión en la que está inmersa España desde mediados de 2008 hizo aumentar el desempleo, que supera el 17,36% de la población activa, y, en consecuencia, caer la demanda.
La industria automotriz española es la tercera de Europa en volumen y representa un 8,4% del PIB. El 80% de la producción se exporta.
La crisis afectó a decenas de miles de empleados del sector, que perdieron su trabajo o redujeron su jornada laboral por los recortes practicados por las principales multinacionales automovilísticas presentes en España.
La medida forma parte de otro paquete de iniciativas anunciadas por Zapatero este martes para impulsar la economía con incentivos a los empresarios y al consumo.
Zapatero empezó anunciando un recorte de 1.000 millones de euros en el presupuesto estatal de este año que se suma al de 1.500 millones de euros decidido en febrero.
Se trata del "mayor ahorro en gasto corriente en un ejercicio presupuestario de la historia de la democracia", aseguró, en un momento que crece el gasto y también el déficit público, que superó el límite del 3% fijado por la Eurozona, después de tres años seguidos de superávit.
Un fondo de 25.000 millones de euros se destinará a préstamos destinados a la "economía verde", que incluye las energías renovables, la rehabilitación y mejora de edificios, el transporte menos contaminante o el reciclaje.
Zapatero explicó que como el sector de la construcción de viviendas, hiperdesarrollado en España en la última década y severamente afectado por la recesión, "ha originado disfunciones importantes" en la economía, hay que "apoyar el desarrollo de otros sectores".
Además, todos los alumnos de 10 años de la enseñanza pública y semiprivada recibirán un ordenador portátil en septiembre, las escuelas tendrán pizarras digitales y los trabajadores desocupados de entre 25 y 40 años podrán inscribirse gratuitamente en la universidad.
También aumentará la desgravación a compradores de viviendas con ingresos bajos y al alquiler, mientras que se suprimirá para ingresos medios. Las pequeñas empresas que mantengan su plantilla se beneficiarán con más desgravaciones de impuestos.
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